viernes, 9 de septiembre de 2011

A comerme Lima!


Desde hace mucho tiempo que tenia ganas de hacer este viaje. Había estado aquí un par de horas, gracias a una escala proveniente de otro destino, pero vamos a olvidarnos de eso.

Ya sabemos que la gastronomía peruana es una de las favoritas del globo, y espero que por medio de este y algunos otros posts, logre darles a conocer el (mi) por qué se merece su fama.

Digo mí, ya que se han escrito bastantes artículos en su honor, y esta vez evaluaré todo lo que pruebe según mi método de los 6 sentidos.

Una boca para los mejores sabores, un ojo para la mejor ambientación, una mano para el mejor servicio, una oreja para la mejor música, una nariz para los mejores vinos y finalmente uno solo se llevará mi sexto sentido, mi corazón.

Voy en el avión, expectante de lo que será este viaje. Mi amigo Juan Pablo duerme profundamente en el asiento de al lado y al mirarlo solo puedo pensar en el dolor de cuello que tendrá mañana.

Aprovecho de hacer mención a la comida de Lan, creo que ha mejorado. La carne mechada que nos dieron, si bien le faltaba su buena pizca de sal, estaba bastante blanda y la pastelera con una buena textura. Han vuelto a los cubiertos metálicos… quizás no es una novedad y no tenia la suerte de viajar hace mucho o no me acordaba.

El avión viene lleno de periodistas, críticos gastronómicos, comilones y otros a quienes nos une la misma pasión, la pasión por el sabor. Mañana se abre al público la feria Mistura, fundada por Gastón Acurio. (Icono de la comida del Perú) y no nos la queremos perder.

Empieza el descenso y hay que apagar los aparatos electrónicos. Mañana iremos a Mistura y en la noche a comer a la Gloria, es lo único que tenemos planeado.

- Señorita tiene que apagar el comput…

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