Desde hace un par de semanas, que estaba con las ganas de ir a probar esta Casa de Langostas, que abrió sus puertas a nuestros paladares hace 20 días.
Luego de varios intentos fallidos logré cumplir mi objetivo, lo que me ha dejado con la guatita llena y el corazón muy contento.
Isla Margarita Lobster House, es el segundo restorán de una familia de chilenos erradicada en Venezuela, quienes hace 30 años atienden a turistas de todo el mundo en Viña del Mar Lobster House (Isla Margarita). Debemos recordar el dicho "la experiencia hace al maestro"...
Desde un principio la atención fue extremadamente amable con la bienvenida de su dueño, quién, por el solo hecho de tener ese tono caribeño me cayó bastante bien...
Sus recomendaciones para empezar; unas clásicas machas a la parmesana ($4,300) de preparación suave, y un Coquille de Ostiones ($4.500), del cuál me enamoré, por su textura y sabor. Sé que no es muy elegante de mi parte decirlo pero la salsa estaba tan buena, que con el Coke no resistimos la tentación y la terminamos de comer sopiada con pan...
Seguimos con la reina de la casa, Media Langosta Thermidor ($19.000) acompañada de mayonesa casera, salsa golf y una reducción de mantequilla. Llegó a la mesa y luego de la respectiva foto, empezamos a comerla... no dejamos ni un solo rastro de su carne, creo que la descuartizamos entera, me sentí como Hannibal (lobester)... excelente y no me parece necesario decir otro comentario.
Por su parte el arroz marinero, no se quedó atrás. La cocción estaba perfecta, el arroz ni muy pegote ni muy graneado, con mucho sabor y una generosa mezcla de mariscos entre calamar, pulpo, camarones, ostiones... ($11.000 para dos personas)
Los postres, solo habían dos opciones, Tiramisú y el Quesillo Venezolano, que traducido al chileno es una buena leche asada. ($2.000) Nos inclinamos por el último y nos dejo listos para irnos a dormir.
El lugar está decorado con lo justo y necesario, de paredes blancas y bien iluminado, resaltando en el medio una linda lámpara de lágrimas.
Se los recomiendo, ya que sin contar el precio de la langosta es una excelente opción para comer muy rico y sin desfinanciarse.
Av. Dardignac 0175, Bellavista.
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