Les recomiendo probar; helado de manjar lúcuma de Guallarauco (mi último y gran descubrimiento), el helado de lúcuma del Café del Opera Catedral en Santiago, los bombones de chocolate blanco rellenos con lúcuma de La Fete y el creme brulee de lúcuma de La Cibuoulette en Viña del Mar.
Cuenta la leyenda que el nombre Lúcuma proviene de una diosa muy linda y orgullosa, pero quien a su vez es muy caritativa, no solo nos deleita con su sabor si no que también nos ayuda a estar felices, jóvenes y lindas/os.
Es un excelente remedio natural contra la depresión, por su alto contenido de niacina, una sustancia más conocida como vitamina B3, que colabora muy eficazmente en el metabolismo de las proteínas y en el proceso de producción de la energía corporal, estimula el buen funcionamiento del sistema nervioso y actúa como un extraordinario energizante, que a demás ayuda a reducir el nivel de colesterol y triglicéridos en la sangre, por lo que resulta de vital importancia para el tratamiento de innumerables enfermedades, especialmente la obesidad y malestares cardiovasculares.
En conclusión la Lúcuma es de mis mejores amigas.